
Desde la comodidad de su casa, en el Londres de 1998, una mujer lee una guía turística de Kabul. En este espectáculo, en el cual la actriz se enfrenta al público cara a cara, poco a poco vamos conociendo la historia de la capital afgana. El autor no se censura a la hora de denunciar los intereses económicos y políticos tanto de China como de Mongolia, Persia, la URSS y EEUU a la hora de invadir, saquear y destruir Afganistán. Tomando en cuenta que esta pieza fue escrita antes del 11-S, y que se estrenó poco después en EEUU, es casi obvio que iba a desatar polémica. El contraste tan extremo entre Londres -desde donde la protagonista cuenta la historia- y Kabul no da lugar a la indiferencia. Sin embargo, es esto mismo lo que propicia la denuncia: es con indiferencia que la clase media occidental mira hacia oriente. A pesar de que oriente muchas veces se encuentra a unas calles de casa: en una tienda, en un bazar, en un supermercado. Siete años después de su estreno, este montaje, dirigido por el gran Mario Gas, vuelve al escenario. Es interpretado con emoción, sensibilidad y convicción por Vicky Peña, quien ganó por esta obra varios premios y una cantidad exorbitante de críticas positivas.