
Las exposiciones colectivas son el equivalente galerístico a la operación bikini. Un esfuerzo muy veraniego en el que las galerías dan lo mejor de sí mismas con un very best de sus artistas representados. Nosotros, voraces consumidores de arte, nos dejamos seducir por el conjunto e, incluso, si hemos sido buenos durante el curso escolar, adquirimos una obra para dejar bien claro que el arte es algo más que la moneda de cambio entre señores encorbatados. Queremos y necesitamos arte en nuestras vidas, y entre la oferta disponible para este junio encontramos la nueva muestra alojada en espai [b], que no solo ofrece trabajos de los artistas de la galería, también exhibe obras que nunca antes se han visto en sus muros. El verano ya está aquí y huele a arte.