Acid Arab es, a grandes rasgos, electrónica contemporánea e infalible impregnada de vestigios arábigos y ecos de Oriente. Como parte de su gira mundial, visitan Barcelona este lunes en la sala Apolo, presentando su último trabajo, Musique de France (Crammed Discs). Guido Minisky y Hervé Carvalho, artífices del proyecto, vuelven después de haberse zambullido en los sonidos del Norte de África y Oriente medio a través de decenas de artistas locales. Una suerte de caldero multicultural, buena muestra de la atmósfera mezclada propia de las calles de París. Después de captar la atención en medios de todo el mundo, llegan para defender en vivo su primer larga duración. Sonido hipnótico, bailable y perfectamente ensamblado. Un crisol de texturas y ecos post-modernos y vestigiales para dejarnos danzando entre dos mundos: un pastiche mágico y envolvente a caballo entre los sonidos de Occidente y los ritmos de Oriente. Pura magia y amor ácido entre culturas, siempre oscilando entre lo exquisito e independiente y lo accesible de un sonido que no cierra las puertas al mainstream.
Muy recomendado.
