Hablar de la música industrial en España es hacer una referencia directa a Esplendor Geométrico. Hace 35 años tres disidentes decidieron desvincularse de Aviador Dro y formar un colectivo independiente, político y teórico, una forma de entender y enfrentarse a la creación musical desde el compromiso y un ejercicio total de libertad. Todo tiene un precio, así que eso les llevó en parte a la incomprensión, primero, y al olvido, más tarde. Sin embargo, todas esas condiciones adversas no fueron suficientes para que continuaran al pie del cañón, y tras piezas como «Necrosis en la Poya» o «Moscú está helado» llegaron «El acero del partido» y una casi infinita colección de referencias, grabaciones accidentales y directos que nunca existieron. Continuaron como un zumbido incómodo, una china en el zapato de la movida, la referencia europea y la huida al extranjero. Celebran sus 35 años, que son muchos, y lo hacen por todo lo alto en la 2 de Apolo. Tras tantos años es una alegría que EG no sean solo una referencia de culto, sino los abanderados de un sonido propio. Gracias. // By Javier Muñoz.
