Grupos de moda, cuidado: ser buenos es sólo la mitad de la historia. Hace dos años, estos dream-poppers de Brooklyn llegaron a nuestra ciudad en la cresta de una ola que hizo que su concierto fuera sold-out en la Bikini. Han pasado poco más de dos años, y ya han sido relegados a la Sala BeCool. ¡Oh, los caprichos del destino! Pero por favor, que esto no os desanime, The Pains of Being Pure at Heart aún conservan las chispeantes melodías y el encrespado indie pop que nos enamoró la primera vez y que respaldaron con dos de los mejores álbums de los últimos años: su homónimo debut y su «Belong», lanzado el año pasado. Se necesita una habilidad especial para escribir joyas pop de tres minutos y medio, pero ya sea imitando a sus héroes del C-86 o con su brillante y valiente nuevo material, está claro que Kip Berman y los suyos la tienen al 100%. En directo tampoco se quedan atrás, y tengo la esperanza de que su vuelta a Barcelona demuestre que nuestro amor por ellos sigue siendo jodidamente igual que el que sentimos la primera vez.
