Una mañana de verano, Magda Casals de Clarà observa risueña en el salón de su piso del Eixample una antigua fotografía en la que aparece junto a Jordi Pujol. Mientras, suenan canciones de Núria Feliu, relatos de toda una vida que Magda identifica como próximos al pueblo catalán. Hace dos meses que el marido de Magda falleció, pero al menos le quedan rituales como estos para sobrellevar el duelo. Cada día se obliga a bajar a la calle, y se topa con un sintecho al que le da algunos céntimos por caridad, que tan solo suponen para la señora insultos de vuelta. Magda no entiende el por qué de los insultos del anarquista pero pronto descubrirá que no posee la capacidad de insultar, cuando ve en la televisión a Pujol emitir unas declaraciones que derrumbarán los cimientos políticos en los que está basada su vida. ¿Llegará Magda a adoptar una visión ácrata del mundo?
Marc Rosich escribe y dirige esta tragicomedia tardoburguesa, que ofrece un reflejo del sentimiento de decepción de gran parte de los convergents tras el destape del Caso Pujol. Una reflexión sobre la caída de un mito desde un divertido prisma almodovariano, en el que una brillante Mercè Aránega da vida a Magda. Podrás sumergirte en este universo de femenino de soledades y añoranzas hasta el 7 de mayo en la Sala Petita del Teatre Nacional.
//foto de David Ruano
