El inclasificable cortometrajista Myroslav Slaboshpytskiy, conocido por su interés en retratar la seca y fascista violencia que impera en los colectivos más marginales de Ucrania, fue galardonado con el mejor premio de la pasada edición de la Semana de la Crítica del Festival de Cannes por su subversivo thriller criminal protagonizado por prostitutas y proxenetas sordomudos. Más allá de su impactante argumento, The Tribe se convierte en una insólita experiencia cinematográfica a causa de la proyección de una agresiva coreografía de gestos en lenguaje de signos que el cineasta opta por no subtitular. Durante ciento treinta minutos de metraje el intrépido espectador vence, con éxito, la batalla contra la ausencia de texto, y recibe una necesaria lección de Historia sobre la metafórica relación entre Ucrania y la Unión Europa, representada a través de los desamparados adolescentes que integran esta salvaje tribu urbana.
