Admír

Audrey y Mirna abrieron Admír hace poco más de dos meses con una propuesta clara: unir la cocina libanesa y las tapas españolas. Según ellas explican, los platos son el reflejo de sus propias experiencias y adaptan las recetas tradicionales de Líbano a formato de tapa siguiendo los sabores que han ido descubriendo con los años. La carta del Admír huye de los tópicos gastronómicos respecto a la comida de Oriente Próximo. Potencia la comida fresca y ligera, con unas tapas que pueden ir variando dependiendo de los productos disponibles en el cercano Mercat de Santa Caterina, de donde proviene buena parte de los alimentos que utilizan.

Así, la sensación que predomina en los platos es la de frescor, que logran con elaboraciones en que la menta, la granada y especias como el cilantro son protagonistas. Como ejemplo, el Jawaneh, unas alitas de pollo muy originales que unen en su salsa el sabor de la carne con toques cítricos muy refrescantes. Un plato del que están especialmente orgullosas, y no es para menos, es su Babaghanoush con cordero, que da la vuelta a la receta tradicional. Pero además, en el Admír también puede disfrutarse de ensaladas tan sabrosas como el Fattoush, receta típica familiar, y de postres deliciosos como su tarta de queso o el Ashta, una copa de nata aligerada que se perfuma con flor de azahar y agua de rosa.

Si no sabes qué probar o tienes dudas respecto a algún plato de la carta, el equipo de Admír te ayudará con una amabilidad y alegría contagiosas. Además, lo hará dentro del buen ambiente general que han logrado crear. El espacio está cuidadosamente decorado, incorporando a los detalles propios de un edificio de Ciutat Vella mosaicos que fusionan Líbano con Barcelona e interiorismo industrial. Por si fuera poco, el restaurante es también galería de arte y desde junio puede verse una colección de Paula Cox dedicada a la mujer palestina. Si estás paseando por Portal Nou y encuentras el Admír con su promesa de Buena comida y buena gente, ¡entra! Saldrás con ganas de volver.