Glaciar

Las paredes de este emblemático restaurante de Plaça Reial guardan secretos e historias, acumuladas durante 100 años, y formando parte de la historia de Barcelona. Glaciar cumple su centenario con una oferta gastronómica renovada, y un espacio que conserva intacto su inconfundible encanto. Es cuestión de pasar sus puertas acristaladas para viajar en el tiempo, al lugar de encuentro de los intelectuales y la alta sociedad catalana que se reunía en este lugar antes de asistir a los diversos espectáculos del cercano Liceo.

Ahora, El Glaciar inicia esta nueva etapa con más pulso que nunca, y el valiente objetivo de recuperar y enamorar a la clientela local, devolviendo a la ciudad y a sus habitantes este emblema de ocio. Al frente de este proyecto se encuentran Javier Lluch y Thaís Ivern, del grupo La Pomada: “nuestro deseo es recuperar la auténtica esencia del local, convirtiéndolo en un punto de encuentro cultural y de ocio, con un servicio de calidad que dignifique la oferta gastronómica catalana en pleno centro de Barcelona”.

El lugar ofrece comidas y cenas con una carta basada en la gastronomía de calidad, productos de temporada y de proximidad, con recetas catalanas y toques franceses. Desde las clásicas ostras o sus míticas patatas bravas, pasando por el steak tartar de ternera sobre tuétano y chips de patatas o el canelón XL de asado con bechamel casera y parmesano. En los postres, no pueden faltar la crema catalana con carquiñolis o los míticos helados de Glaciar que, de hecho, ¡dieron origen a su nombre!

Además, hasta las 3h (2h en la terraza) también es un lugar perfecto para disfrutar de una copa. Todo ello en un local reformado que ha mantenido intactos sus elementos históricos -mesas, sillas, escaleras, cristaleras- incorporando, además, una espectacular cocina a la vista para potenciar el show cooking o ver cómo se preparan las copas en la zona de bar-coctelería.

Considerado un restaurante que forma parte del catálogo de patrimonio histórico-artístico y elementos protegidos realizado por el Ayuntamiento de Barcelona, Glaciar merece una y mil visitas, y ¿qué mejor ocasión ahora que está de aniversario? Por 100 años más.