Ikra

La verdadera ensaladilla rusa lleva lengua de vaca. Eso lo sabe cualquier ruso que entienda de gastronomía, como los propietarios del Ikra, un restaurante ubicado en pleno Eixample derecho, a pocos minutos del centro. Se trata de un local amplio y diáfano, con diseño sobrio y elegante, en el que se practica una cocina que combina la tradición catalana y española con la rusa, algo poco común en nuestra ciudad. Así, puedes deleitarte con un borsh (sopa roja de remolacha) para seguir con una esqueixada de bacalao mientras haces buena cuenta de unas papitas arrugás con mojo picón. Y todo, además, de kilómetro cero, con alimentos frescos y siempre de temporada. Servidor quedó encantado con los langostinos en tempura con crema de wasabi, pero también con el servicio -excelente- y, todo hay que decirlo, con el precio: difícilmente se puede comer tan bien en un lugar tan céntrico de forma más asequible. Así que ya lo sabéis, si este finde queréis innovar no os tenéis que ir muy lejos: acercaos al Ikra y disfrutad de su cocina internacional. Eso sí: de ningún modo os perdáis la ensaladilla rusa (rusa-rusa, como ellos mismos la llaman). Ya me daréis las gracias.