Durante un paseo por el mítico barrio Sant Gervasi, situado en la zona alta de la ciudad condal, nos topamos con una ligera pendiente sobre la que se erigía un restaurante exhuberante y luminoso. No pudimos resistir la tremenda atracción que ejercía sobre nosotras y nos adentramos a aquel lugar, donde nos recibieron con la más flamantes de las sonrisas. Nuba pertenece al grupo Costa Este y está presente en la escena gastronómica de Barcelona desde el 2009. Rodeado de una generosa vegetación, cuenta con una gran infraestructura segmentada en diferentes zonas -restaurante, cocktail bar, terraza y chill out-, para el deleite de sus visitantes.
Con el chef Billy Baroja al mando, Nuba ofrece al comensal una carta que destaca por sus apuestas de la más alta cocina internacional. Nos sorprendieron de manera muy grata entrantes como las croquetas de jamón ibérico, los nems de verduras y los huevos rotos con patatas y bogavante. Tras abrir el apetito con los anteriores manjares, pasamos a degustar el tartar de atún rojo con guacamole, el ravioli de pera con crema de gorgonzola y los canelones de faisán con foie y trufa. Increíble pero cierto; nos quedó hueco para degustar una deliciosa lubina salvaje con verduritas, el steak tartar nature vuelta y vuelta con helado de mostaza de dijon y la paletilla de cabrito deshuesada con parmentier. Y por último, para refrescar el paladar, contamos con una suerte de souflé de coco y menta con mango.
A la llegada del ocaso y de los cocktails, nos sorprendió una excelente selección de electrónica que comenzó a rugir salvaje en este concurrido local. Un final animado de nuestra visita a un sitio al que, sin lugar a dudas, no dejaremos de visitar, gracias a su alta cocina; su ambiente elegante y animado; su atento staff y su inigualable localización.
