Thai Tuk Tuk

Barcelona necesita más restaurantes como el Thai Tuk Tuk. Un tailandés de barrio, pequeño, sencillo y ardientemente delicioso. Con poco más de seis mesas y una decoración austera (siendo generosos), el Tuk Tuk es capaz de sacar adelante platos tailandeses tan reconfortantes como su Keang Kiew, un curry verde con ternera, berenjena, calabacín y brócoli. Un plato de esos capaces de alegrarte un día torcido. El nivel de picante es bastante moderado, a no ser que te pongas de acuerdo con el chef para que cocine como a él le gusta. Pídete una Singha fría y disfruta entre sudores de tu curry picante, como si estuvieras en una acera de Bangkok. Los encargados son una pareja de tailandeses (uno en la cocina abierta, el otro entre las mesas) tan acogedores que te hacen sentir como un habitual desde el primer minuto. No te dejes frenar por la estética y confía en el Tuk Tuk. Su cocina auténtica y sin florituras es un humilde gran descubrimiento.