En Brut, la barcelonesa Raquel Gualtero traza una ruta en la que ahonda en el verbo y en el movimiento en un proceso de pugna interior. Como el buen cava, esta pieza es un ejemplo de frescor, cuerpo y estructura, de aromática finura. La artista conecta los ámbitos de lo emocional y lo terrenal para explicar al espectador sus sueños y vivencias personales, de manera que podamos hacerlos nuestros. De este modo, se nos ofrece la oportunidad de partir en libertad de un punto que nos ayuda a explorar nuestro propio universo.
Será representada esta tarde y mañana en Sala Hiroshima, un espacio clave en la ciudad si lo que deseamos es descubrir nuevos creadores y creadoras que, en esta ocasión, la sala se alía con la Mostra IN SITU de Arts Santa Mónica. ¡No te la pierdas!
